La liquidez se define por la rapidez con que un activo puede ser comprado o vendido sin que cambie el precio y depende directamente del volumen de operaciones y de la cantidad de participantes en el mercado. Cuando hay una falta de demanda de los participantes en el mercado (ya sea compradores o vendedores), se dice que la liquidez esta baja, afectando negativamente en la ejecución de las ordenes, ya que a menudo se acompaña con un aumento del spread. Observemos situaciones de baja liquidez:
Operar durante cualquiera de los tiempos o eventos indicados anteriormente podría conducir a consecuencias no deseadas ó pérdidas. Debido a las órdenes pendientes y a órdenes IF Done que han siendo cumplidas al precio solicitado, o en uno de los precios disponibles en el mercado, o se pueden ejecutar con desplazamiento del precio ya que este puede cambiar al ejecutarse la orden.
En algunas circunstancias, algunas cotizaciones no del mercado pueden darse durante los períodos de baja liquidez.
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